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miércoles, 2 de marzo de 2022
domingo, 13 de octubre de 2019
domingo, 23 de julio de 2017
Agustín Piminchumo, Personalidad Meritoria de la Cultura
Fuente: Agencia Peruana de noticias Andina
Destacado artesano de caballitos de totora fue reconocido como Personalidad Meritoria de la Cultura
Más información en el siguiente enlace:
domingo, 30 de agosto de 2015
Exposición Tierra de Tradiciones: La cestería en junco y totora en Huaura, Huaral y Barranca
Fotografía:
Archivo Ministerio de Cultura-Perú
Inauguración:15 de setiembre de 2015 a las 12:30 p.m.
miércoles, 28 de noviembre de 2012
Exposición Cestería de Santa Rosa de Chontay
Fotografías (de arriba-abajo):
1 al 7 Catálogo de exposición (mayo, 2003).
Curaduría, investigación y textos: Sirley Ríos Acuña y Natividad Vásquez Pérez
Ver el catálogo completo en:
Ríos Acuña, Sirley y Vásquez Pérez, Natividad. Cestería de Santa Rosa de Chontay (catálogo de exposición). Lima: Museo Nacional de la Cultura Peruana-INC, mayo 2003.
Ríos Acuña, Sirley y Vásquez Pérez, Natividad. Cestería de Santa Rosa de Chontay (catálogo de exposición). Lima: Museo Nacional de la Cultura Peruana-INC, mayo 2003.
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Natividad Vásquez Pérez,
Santa Rosa de Chontay,
Sirley Ríos Acuña
lunes, 26 de noviembre de 2012
Exposición y colección de arte popular del Museo de la Nación de Perú
Fotografías (de arriba-abajo): Sirley Ríos Acuña. 2007.
1. Jarras, chúas o platos, apajatas o limitatas y torito de Pucará. Cerámica vidriada. Puno.
2. Canastas y cernidor de la Amazonía. Cestería.
3. Danzantes de la fiesta de la Virgen del Carmen de Paucartambo obra del cusqueño Santiago Rojas Álvarez y máscaras diversas. Imaginería y mascarería.
4. Mates azucareros del Valle del Mantaro (Junín) y músico ayarachi de cerámica de Puno.
5. Cruz de camino. Madera y pasta policromada. Florentino Jiménez Toma. c. 1996. Ayacucho.
6. Nacimiento cusqueño. Muñequería. Maximiliana Palomino de Sierra. Cusco.
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Sirley Ríos Acuña
lunes, 30 de julio de 2012
El arte ese´ejja en Ruraq Maki (noticia)
Fotografías (de arriba-abajo): Archivo Ministerio de Cultura de Perú. 2012.
Las manos de Elestina, Elda y Mercedes, de la etnia ese´ejja, han hecho de la confección de productos con la liana del árbol de tamshi un arte. Sombreros, canastas, abanicos, bolsones, carteras, paneras, de extraña belleza y minucioso acabado, están exhibición y venta en el Ruraq Maki, Hecho a mano, en la sede central del Ministerio de Cultura.
Vestidas las tres con la usanza ese´ejja, hilan en el piso con la ayuda de su pie desnudo, sin desconcentrarse. Forman parte de la comunidad Palma Real, que se halla a tres horas río abajo desde Puerto Maldonado. Junto a Sonene e Infiernillo son las únicas tres comunidades de la etnia que aún sobreviven en Madre de Dios.
El tamshi es un árbol endémico de la región. La liana es una corteza adherida al árbol que cortan y procesan. Le quitan la cáscara, la adelgazan o quiebran, la jalan a través de un hueco hecho en el centro de una lata de atún con el fin de alisarla, y la cortan de acuerdo a sus necesidades. Inmediatamente la tiñen. El tinte se lo procuran del achiote (rojo), el huito (azul oscuro), el palillo o curcuma (amarillo), la hoja de sapinanga (lila).
Las tres mujeres ese´ejja volverán a su pueblo y rendirán un informe a su comunidad. Contarán su experiencia. Hablarán de la urbe y de cómo fueron recibidos sus productos. Continuarán en la lucha por la sobrevivencia de sus vidas y de sus costumbres. Forman parte de la exposición-venta de Ruraq Maki, Hecho a mano, en la sala Nasca del Ministerio de Cultura. Hasta el próximo 29 de julio.
Vestidas las tres con la usanza ese´ejja, hilan en el piso con la ayuda de su pie desnudo, sin desconcentrarse. Forman parte de la comunidad Palma Real, que se halla a tres horas río abajo desde Puerto Maldonado. Junto a Sonene e Infiernillo son las únicas tres comunidades de la etnia que aún sobreviven en Madre de Dios.
El tamshi es un árbol endémico de la región. La liana es una corteza adherida al árbol que cortan y procesan. Le quitan la cáscara, la adelgazan o quiebran, la jalan a través de un hueco hecho en el centro de una lata de atún con el fin de alisarla, y la cortan de acuerdo a sus necesidades. Inmediatamente la tiñen. El tinte se lo procuran del achiote (rojo), el huito (azul oscuro), el palillo o curcuma (amarillo), la hoja de sapinanga (lila).
Las tres mujeres ese´ejja volverán a su pueblo y rendirán un informe a su comunidad. Contarán su experiencia. Hablarán de la urbe y de cómo fueron recibidos sus productos. Continuarán en la lucha por la sobrevivencia de sus vidas y de sus costumbres. Forman parte de la exposición-venta de Ruraq Maki, Hecho a mano, en la sala Nasca del Ministerio de Cultura. Hasta el próximo 29 de julio.
28 julio 2012
martes, 17 de julio de 2012
La Semana Santa en el arte popular
Fotografías (de arriba-abajo): Archivo Universidad del Pacífico. Piezas de la colección del Museo Nacional de la Cultura Peruana-Ministerio de Cultura de Perú.
1. Domingo de Ramos. Cerámica modelada y policromada. Virgilio Oré Chávez. Ayacucho. 2. Retablo Semana Santa. Madera, pasta modelada y policromada. Julio Urbano Rojas. Ayacucho. 3. La Piedad. Madera tallada y policromada. Anónimo. 4. Retablo Camino al Calvario y Señor de la caída. Madera y pasta modelada y policromada. Joaquín López Antay. Ayacucho. 5. Retablo con escena de la Ultima Cena. Cerámica modelada y engobada. Jesús Urbano Rojas. Ayacucho.
SEMANA SANTA
Exposición en la vitrina cultural de la Universidad del Pacífico
Abril, 2009
Por Marcela Olivas Weston
Este acto cumbre que la cristiandad conmemora cada año, ha sido motivo de inspiración para los artistas tradicionales peruanos que plasman con sus manos, en cerámica, en madera, en piedra, en tela, en metal, en cera, en cuero, célebres escenas que nos conmueven por su admirable creatividad.
El gran pintor José Sabogal escribe: “En los numerosos pueblos peruanos se conmemora el Domingo de Ramos, en pintoresca escena realista de hermosos contornos decorativos en la que, toda la población, se siente ser así como una Jerusalén cristiana que recibe al Divino Jesús de Nazaret”.
“En una explanada apropiada, donde termina la barriada y comienza la campiña, arman alegre tienda con maderos y con telas blancas enguirnaldadas, con palmas y flores. Sobre un escaño alfombrado, el Nazareno aparece sentado con vestimenta de gala, con el cabello en bucles ensortijados, potencias y sandalias de plata relucientes, túnica de terciopelo morado y capa blanca bordada y galonada de oro. La mano derecha en majestuosa actitud de bendecir, la izquierda con un hermoso gajo de palma primorosamente trenzada”.
“La Cena es el gran cuadro de la imaginería en las iglesias poseedoras de riquezas coloniales…Jesús, en bella figura majestuosa, posa la diestra sobre un pan moreno y la izquierda en el cáliz. Un garrafón de vino han colocado frente a la divina imagen y a todo lo largo del mantel platos y fuentes con selectas viandas verdaderas. Los doce legendarios discípulos, a derecha e izquierda de Nuestro Señor…El contraste se destaca en un extremo de la mesa con la figura innoble de Judas, de piel abotagada y perversos ojos que los vidrios intensifican. El buen imaginero ha tallado vigorosamente este personaje logrando hacerlo odioso y repulsivo”.
“Las Tres Horas es el acto cumbre del sentimiento religioso en la Semana Santa…cuando llega el momento culminante de la agonía, el hábil sacristán entra en acción con el juego de sus cordones. La noble cabeza de Jesús se alza hacia el Santísimo Padre, desciende levemente, y con suave golpe cae inanimada sobre el pecho”.
“En todas las poblaciones peruanas se celebra jubilosamente la Pascua de Resurrección. En algunas continuando las tradicionales ferias con sus esparcimientos y espectáculos varios. En la mayoría de ellas, con la divertida farsa de la ‘Quema de Judas’…La procesión de Pascua en la ciudad colonial de Ayacucho, asume magnificencia de tiempos pasados Es la más famosa festividad pascual que se conserva en el Perú el estilo del virreinato. Es esta una noche cálida de fogatas y de truenos que hay que pasarla en vela hasta la salida del sol del día domingo. La luminosa anda piramidal confeccionada con innumerables cirios y pámpanos de cera, está a las 12 de la noche en el umbral de la catedral para transponerla en el primer minuto del día glorioso del Domingo de resurrección”.
La presente exposición es un homenaje a ese arte popular, representado aquí por obras de reconocidos artistas tradicionales inspirados en la Semana Santa.
- Cristo crucificado en urna. Cerámica modelada y engobada. Jesús Urbano Rojas, Ayacucho.
- Retablo con escena de la Ultima Cena. Cerámica modelada y engobada. Jesús Urbano Rojas, Ayacucho.
- Retablo con escena de Jesús cargando la cruz. Cerámica modelada y engobada. Anónimo, Ayacucho.
- La Piedad. Madera tallada y policromada. Anónimo.
- Retablo Semana Santa. Madera, pasta modelada y policromada. Julio Urbano Rojas, Ayacucho.
- Calvario. Cerámica modelada y pintada. Anónimo, Ayacucho.
- Retablo Ecce Homo. Madera, pasta modelada y policromada. Esposos Núñez, Ayacucho.
- Retablo Resurrección. Madera y piedra de Huamanga policromada. Anónimo, Ayacucho.
- Cruz de la Pasión. Madera tallada y pasta policromada. Anónimo, Ayacucho.
- Domingo de Ramos. Cerámica modelada y policromada. Virgilio Oré Chávez, Ayacucho.
- Retablo Camino al Calvario y Señor de la caída. Madera y pasta modelada y policromada. Joaquín López Antay, Ayacucho.
- Palma tejida, estilo copa, Lima.
- Palma tejida, estilo choclito, Lima.
Lima, 7 abril 2009.
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Marcela Olivas Weston,
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martes, 12 de junio de 2012
El arte de la cestería en el Norte Chico (Lima)
Fotografías (de arriba-abajo): Estela Miranda y Marcela Olivas. Archivo Universidad del Pacífico.
CESTERÍA DEL NORTE CHICO
Exposición en la vitrina cultural de la Universidad del Pacífico
Mayo, 2012
Por Marcela Olivas Weston
En los distritos de Végueta y Medio Mundo de Huacho, en la provincia de Huaura, al norte del departamento de Lima, entre los kilómetros 150 y 175 de la Panamericana Norte, se ha desarrollado el tejido en cestería, gracias a que en los humedales de la albufera de “Medio Mundo” y del río San Felipe crece una vegetación anfibia de junco (Scirpius sp) y de totora (Schenoplectus califormicus), materias primas para esta labor. En Bandurria, un yacimiento arqueológico ubicado a 10 kilómetros de Huacho, con una antigüedad de 2,500 años a.C., se ha comprobado que sus habitantes abastecían de recursos marinos a los de Caral y Supe y usaban canastas y bolsos de junco y totora para transportar el pescado y los mariscos a grandes distancias.
Esta es una labor netamente femenina, las artesanas la desarrollan por tradición familiar, las niñas van aprendiendo desde pequeñas imitando a las mayores. Todas trabajan en sus hogares, ayudadas por sus hijos o por sus esposos en algunos casos.
Entre los productos que confeccionan las artesanas de Végueta y Medio Mundo encontramos cestos, fruteros, canastas de variados tamaños, paneras, cofres, asientos para carros, individuales de mesa, polleras para guardar huevos, sombreros, esteras y bolsas que pueden ser de base cuadrada o base circular. También tejen, con gran habilidad manual, llaveros, señaladores de libros, abanicos, escarapelas, arreglos florales, porta-lapiceros, servilleteros, posa-vasos, papeleras y suvenires.
CONTACTO/ PEDIDOS:
Reyna Soto, Presidenta de la Asociación de Mujeres Artesanas del Norte Chico, Av. Bolognesi 501, Végueta, Huacho, Provincia de Huara, Lima.
Telf. 7896819.
Lima, mayo 2012.
El arte del tejido en fibra vegetal: la cestería de Santa Rosa de Chontay (extracto)
Fotografías (de arriba-abajo). Archivo Sirley Ríos Acuña.
1. Portada de la revista Artesanías de América, Nº 59-60. 2. Taller común de Santa Rosa de Chontay. 2003. 3. Taller de cestería en las riberas del río Lurín. El artesano José Chilón Huangal y su familia en plena elaboración de las canastas del tipo balay junto al río Lurín. 2003. 4. Trampa para camarones y canastas domésticas de los tipos platanera, guanera y papera elaboradas por Marcos Chumpitáz Hidalgo. 2003. 5. Criadero para camarones elaborado por Diego Chumpitáz Ruíz. 2003. 6. Canasta doméstica del tipo guanera elaborado por Marcos Chumpitáz. 2003. 7. Costurero elaborado en 1997 por Andrés Changanaquí Escate. 2003.
Por Sirley Ríos Acuña
Resumen
La cestería en el Perú data de tiempos precolombinos y es en la actualidad una actividad bastante extendida a lo largo de la costa peruana.
El presente artículo nos presenta un amplio panorama, de la producción de tejidos en fibra vegetal, en Santa Rosa de Chontay. La elaboración de cestas en ese lugar, está estrechamente relacionada a la producción de canastas de uso doméstico, tradicionales esteras y las ancestrales trampas para recolectar camarones.
El río Lurín juega un papel importante en la geografía de Santa Rosa de Chontay, en las actividades realizadas por sus habitantes y en su producción artesanal. En los márgenes del río crecen el carrizo y la caña brava, materias primas que los hábiles pobladores han sabido aprovechar, con gran ingenio, en la elaboración de cestas para diversos usos.
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Una de las manifestaciones plásticas más antiguas en el mundo, es el tejido en fibra vegetal, llamado comúnmente cestería, cuyas antiguas evidencias físicas no se han encontrado, en la cantidad como debieron de haber existido, por el tipo de material orgánico perecible en el tiempo. Se han hallado algunos vestigios que señalan que la cestería debió haber precedido y gestado la invención de la cerámica. De su antigüedad dan cuenta el folklore y los mitos de creación de muchas partes del mundo.
Bajo el término cestería se encuentran no sólo cestos, sino distintos tipos de artículos tejidos y confeccionados con fibra vegetal, clasificados por la constitución del material en duros y blandos. Algunos estudiosos han considerado estos artículos dentro de la especialidad de la textilería, debido a la técnica de su confección. Se encuentra asociada desde tiempos remotos a la tarea de recolección, cacería, pesca y agricultura.
La cestería en el Perú data de épocas prehispánicas y está difundida a lo largo de la costa. La tradición cestera de las riberas del río Lurín también es ancestral.
El presente artículo es el resultado de un trabajo de campo en la zona de Santa Rosa de Chontay y gira en torno a los testimonios de los propios artesanos (1).
En esta oportunidad se presenta un panorama general de la producción de tejidos en fibra vegetal, siendo destacadas las canastas domésticas que reciben diferentes denominaciones relacionadas a su uso: platanera, guanera y papera. Así mismo, se encuentran las características esteras que se emplean para los techos y la construcción de las viviendas en las zonas urbano marginales. Del conjunto sobresalen las ancestrales trampas para camarones que, en época de lluvias, son elaboradas en gran cantidad. Es interesante comprobar que estas últimas se mantienen en uso por los pobladores contemporáneos, lo que amerita su revaloración.
SANTA ROSA DE CHONTAY
La comunidad campesina de Santa Rosa de Chontay, reconocida oficialmente en 1990, está ubicada en el distrito de Antioquía, provincia de Huarochirí, departamento de Lima. La mayor población se asienta a orillas del río Lurín en el km. 37.5 de la carretera rumbo a la mencionada provincia. Forma parte de una de las cinco comunidades campesinas del distrito de Antioquía.
De la época prehispánica, queda como evidencia el camino inca o cápac ñam que aún puede transitarse entre los cerros vecinos. Este camino unía Pachacámac con el Santuario de Pariacaca, Xauxa y el Cusco. A esta ruta se suman las zonas arqueológicas de Lindero y Chontay y los enigmáticos petroglifos. Actualmente la comunidad ocupa el mismo lugar donde estuvo ubicado un tambo antiguo.
El pueblo colonial data más o menos de 1630, que fue creado junto a otros poblados antiguos de la zona: Cochahuayco y Sisicaya. De esa época colonial queda la, hoy reconstruida, iglesia que aún conserva su campana fechada en 1794.
Durante la república comenzó a poblarse nuevamente, con pocas familias de migrantes y algunos peones de la casa hacienda. Hoy sus descendientes están dedicados a la agricultura y a la cestería.
En la actualidad se compone de aproximadamente 30% de habitantes oriundos del lugar y un 70% de migrantes de otras provincias del Perú.
En cuanto a las autoridades, que tienen injerencia en la comunidad, pueden mencionarse a la Junta Directiva Comunal, compuesta por los propios comuneros, un Teniente Gobernador que es la autoridad política y el Agente Municipal que es el representante del Alcalde del Distrito.
Las fechas importantes de celebración son en primer lugar, la fiesta patronal de Santa Rosa de Chontay durante los días 29, 30 y 31 de agosto; en segundo lugar, la fiesta patronal, menos pomposa, en honor a San Martín de Porres, realizada en noviembre; luego sigue la fiesta de carnavales con la característica yunza entre febrero y marzo; finalmente, la fecha del 20 de julio que es el Aniversario de reconocimiento oficial de la comunidad.
La comida tradicional de la zona, que está pasando al olvido, es la sopa seca, denominaban por los antiguos pobladores mancha pecho. Este potaje consta de tallarines, carapulcra con pollo, gallina y chancho. Debido a la existencia de camarones en el río Lurín se acostumbra a preparar chupe, ceviche, chicharrón y otros platos en base a ese marisco.
La zona cuenta con sol todo el año y sembríos que cubren todos los rincones de la quebrada, sustituyendo las antiguas plantaciones de coca, hoy desaparecidas. A lo largo de la ruta, se observa la hermosa campiña cubierta de árboles frutales (manzanas, membrillos, pacaes y paltas) y cultivos de pan llevar.
En ambas márgenes del río emerge, como flora natural, el carrizo y la caña brava, especies que los pobladores han sabido aprovechar, con mucho ingenio, en la elaboración de canastas para diversos usos. Entre las piezas más características figuran las canastas para criar y atrapar camarones durante la crecida del río.
LA ACTIVIDAD ARTESANAL DE LA CESTERÍA EN SANTA ROSA DE CHONTAY
Debido al clima cálido, la presencia de cañas en las riberas del río Lurín es abundante, motivo por el cual los pobladores estables han optado por dedicarse eventualmente a la cestería y principalmente a la elaboración de esteras.
Es una actividad de subsistencia que, de algún modo, ayuda a la precaria economía de los artesanos, quienes a la vez se dedican a otras actividades como la agricultura y la albañilería. Algunos han abandonado sus parcelas por el alto costo que significa mantenerlas.
La cestería es un oficio de larga data en los Andes centrales. Sin embargo parece haberse perdido en la memoria del lugar, pues los actuales pobladores indican que se había iniciado hace unos 40 o 50 años; a excepción de la familia Marchán que manifiesta que entonces la tradición cestera ya era conocida.
Aprendizaje
La mayoría de artesanos aprendieron desde niños el oficio, mediante la observación y participación en alguna etapa del proceso de elaboración de las canastas y esteras.
La enseñanza de la cestería en Chontay se da de dos formas:
1° entre no familiares y
2° entre familiares: de padres a hijos y viceversa o de hermanos a hermanos, abuelos a nietos, tíos a sobrinos.
Materia prima
Se emplean la caña brava y la caña hueca o carrizo. Ocasionalmente la sacuara y el carricillo.
La caña brava (Arundo Donax, familia: Gramineae) crece de forma silvestre en la ribera del río. Llega a tener una altura máxima entre 9 a 10 metros la más gruesa. Esta caña demora en madurar de uno a un año y medio, tiempo propicio para ser empleada. Se dice que mientras más madura esté se garantiza una mayor duración de los objetos elaborados. Se caracteriza por ser más dura y de mayor grosor o diámetro que el carrizo. Debido a que tiene una mayor carnosidad y resistencia, requiere pasar por unos procesos previos de flexibilización. Por su dureza se la emplea generalmente para hacer canastas. También las más grandes pueden ser vendidas como “parantes” (varas de caña) y ser usados para el techo de las casas rústicas.
Esta caña tiene una flor a la cual llaman “sacuara”, que crece en la parte superior de la caña madre y que está conformada por un tallo delgado con unas espigas de color entre marrón y crema. De su tallo se hacen cestos pequeños y caseros. Al respecto se menciona: “…por su diámetro angosto y su altura pequeña su utilización es más bien casera, los artesanos la utilizan para confeccionar cestos y guardar sus verduras o hacer secar los quesos, por lo dificultoso y su fragilidad, no es material preferido por los artesanos para hacer canastas para la venta.” (2) Hoy las comercializan para convertirlas en adornos o “plumillas” de colores.
La caña hueca o carrizo (Phragmites australis - P. Communis) también crece de forma natural alrededor del río. Madura a los seis u ocho meses. Crece hasta 2 metros de altura y su tallo es más flexible y delgado en grosor respecto de la caña brava. Se caracteriza por su “…color verde intenso en su estado inicial y amarillo al secarse; tallo de forma redonda: su forma es rígida y resistente, posee nudos equidistantes que aumentan a medida que alcanzan un nuevo ciclo de crecimiento.” (3) Se emplea por lo general para elaborar las trampas para recoger camarones y esteras, excepcionalmente para las canastas domésticas.
Proceso de elaboración
Son dos momentos por los que atraviesa la producción cestera, cada cual con sus respectivas fases.
Sobre la materia prima:
1. Selección
2. Corte de caña
3. Pelado
4. Partido de caña (en varillas)
Sobre el objeto:
1. Selección de varillas de caña
2. Disposición de las varillas
3. Tejido (de la base, cuerpo, borde y asas)
(1) Cabe señalar que en mayo del 2003 se realizó en el Museo Nacional de la Cultura Peruana la exposición “Cestería de Santa Rosa de Chontay”, donde se presentó de manera didáctica los resultados de la investigación, contando con el apoyo de la Doctora Natividad Vásquez Pérez, quien nos contactó con los artesanos.
(2) SOTO; 1987: 35.
(3) UGARTE-QUIROZ; 1996: 20.
Ver el artículo completo en:
Ríos Acuña, Sirley. “El arte del tejido en fibra vegetal: La cestería de Santa Rosa de Chontay.” Artesanías de América, 59-60 (2005), pp. 151-172.
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